Aplaudimos la decisión solidaria y valiente del Gobierno de Colombia para regularizar a cerca de un millón de migrantes venezolanos

Aplaudimos la decisión solidaria y valiente del Gobierno de Colombia para regularizar a cerca de un millón de migrantes venezolanos indocumentados que ya se encuentran en su territorio, por medio de un Estatuto Temporal de Protección por un periodo de 10 años, como un mecanismo complementario al régimen de protección internacional de refugiados. Con este instrumento jurídico la población venezolana podrá insertarse en la sociedad, aportar al crecimiento económico del país y acceder con mayor facilidad a trabajo formal, educación o salud.

Esta medida ratifica la política de acogida y flexibilidad migratoria y pone a Colombia a la vanguardia de las políticas de movilidad humana en América Latina, convirtiéndolo en el principal país de acogida de la diáspora venezolana.

Esperamos que otros países de la región sigan su ejemplo, que Colombia genere los instrumentos necesarios para que la implementación de este marco normativo sea una realidad y que la comunidad internacional contribuya con recursos y herramientas para atender a la población migrante. Es fundamental que esta norma de regularización tenga un observatorio internacional para extraer aprendizajes para nuevas políticas regionales y globales con enfoque en derechos.

Instamos a que estas normas sean inclusivas y que contemplen la planificación territorial para que cuente no solo con las herramientas normativas sino con el presupuesto necesario para lograr verdaderos cambios sociales y sistémicos.